Si se considera que la finalidad esencial de las sociedades humanas será conseguir que todos los habitantes de los territorios donde residen puedan desarrollar sus vidas dentro de las mejores condiciones de bienestar, libertad y conocimiento; si además se considera que esas condiciones serán el resultado de la obtención de los bienes y servicios que den satisfacción a las necesidades vitales y culturales, es imprescindible precisar en qué consisten esas necesidades.
Se da el nombre de necesidades humanas a todas las exigencias de la Naturaleza que rodean a los individuos de la especie humana durante todo el tiempo de sus vidas y les obligan e impulsan a ejecutar acciones dirigidas a proteger, conservar y mantener la vida, a sostenerse en buen estado físico y psicológico, a reproducirse, obtener conocimientos, comodidades y facilidades que les hagan posible el libre ejercicio de su voluntad y el desarrollo de la convivencia social.
Han sido clasificadas en dos grandes grupos; el primero es el de las necesidades vitales o básicas y el segundo es el de las necesidades derivadas de las básicas, también denominadas culturales. Las primeras tienen directa relación con la conservación de la vida y la acomodación al medio ambiente; lo característico de su exigencia es que son inexcusables. Las segundas son complementarias o accesorias de las vitales o básicas; el nivel de su exigencia lo impone el medio social.
Entre las más importantes necesidades humanas vitales o básicas están las de alimentación, vestido, vivienda, higiene, cuidado de la salud, que incluye la prevención y curación de enfermedades, la satisfacción sexual y la reproducción. Entre las más importantes necesidades humanas culturales o derivadas de las básicas están las de prevención de accidentes y de riesgos, transporte, comunicación, información, educación, obtención de bienes, que incluye la adquisición de muebles y artículos de uso doméstico, obtención de conocimientos, conformación de la familia, estimación y reconocimiento social, descanso y recreación.
Una relación no taxativa del cuadro general de necesidades de los seres humanos puede agrupar en cuatro secciones las condiciones esenciales de la subsistencia y de la convivencia social, así: 1) Conservación de la vida, 2) Conservación de la especie humana, 3) Relación con la Naturaleza y adaptación a ella y 4) Relación con la sociedad y convivencia dentro de ella.
Son necesidades de conservación de la vida: 1) Alimentación, 2) Conservación de la salud y 3) Protección de la vida y la integridad individual.
Son necesidades de la conservación de la especie humana: 1) Reproducción y 2) Familia.
Son necesidades de relación con la Naturaleza y de adaptación a ella: 1) Aprovechamiento racional de los recursos naturales para la producción de bienes por medio del trabajo, 2) Protección ante los accidentes del clima y de la Naturaleza, 3) Movilización y transporte y 4) Obtención de conocimientos.
Son necesidades de relación con la sociedad y de convivencia dentro de ella: 1) Libertad individual, 2) Comunicación, 3) Información, 4) Cooperación en el trabajo y en la obtención del conocimiento, 5) Participación en la producción y distribución de bienes y servicios, 6) Obtención de recursos para satisfacer las necesidades vitales o básicas y las derivadas, de carácter individual, 7) Aprendizaje para la convivencia, 8) Participación en la organización de la sociedad y 9) Participación en la conservación de un orden justo.
Normalmente, cada ser humano está en capacidad de aplicar su libertad al objetivo de atender y dar satisfacción a sus necesidades vitales y culturales; para conseguir ese resultado debe realizar actos sobre la Naturaleza o sobre la sociedad, no de modo aislado sino dentro del ámbito de las relaciones humanas.
Toda la actividad necesaria para producir, obtener y distribuir los bienes, servicios o elementos destinados a la atención, facilitación y satisfacción de las necesidades humanas debe efectuarse dentro del modo de las relaciones entre los individuos de la especie; de ahí que esa actividad sea el principal contenido de las relaciones humanas.
Gran parte, o la mayoría, de los bienes, servicios o elementos que son utilizados para la atención, facilitación y satisfacción de las necesidades humanas puede producirse mediante el trabajo material o intelectual que realicen los individuos sobre los recursos naturales existentes en el territorio habitado por cada grupo humano o nación. En la realización del trabajo concurren tanto la fuerza física de los trabajadores como la habilidad en el manejo de los materiales, el arte y la aplicación de los conocimientos que provienen de la ciencia y de la tecnología, los cuales son el resultado de la observación y del estudio de la Naturaleza. Esos conocimientos conducen a la creación y al empleo de instrumentos y máquinas que pueden construirse con elementos provistos por los mismos recursos naturales.
En las naciones que se organicen como sociedades democráticas lo esencial de la organización consistirá en asegurar que todos los habitantes puedan colmar la satisfacción de sus necesidades vitales y culturales, impidiendo que el abuso de las libertades, el uso de la fuerza, o el sometimiento a la protección del más fuerte, sean los medios empleados para alcanzar el éxito de los intereses personales.
El Derecho asegurará esa posibilidad mediante la creación de un orden jurídico que tenga como punto de partida la declaración constitucional de los derechos fundamentales. En cada uno de esos derechos estarán incluidas una o varias de las necesidades vitales o derivadas de los seres humanos. De este modo, el ordenamiento jurídico protegerá la libertad de todos los habitantes para alcanzar el objetivo de satisfacer las necesidades humanas.
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